El trabajo de Oier Etxeberria cuestiona las formas de representación del entusiasmo y el rechazo a partir del análisis y reconstrucción de distintos rituales de celebración colectiva que tiene lugar en el espacio público. Piezas de audio, esculturas o partituras visuales y sonoras, collages "imprecisos", que trazan un recorrido por la iconografía, la historia de la música o la escritura.